Liquen plano oral, la enfermedad infecciosa más frecuente de la mucosa bucal
Patología relativamente frecuente
Es una patología relativamente frecuente en las consultas de los dentistas, se trata de la enfermedad no infecciosa más frecuente de la mucosa oral. La causa del liquen plano oral es desconocida. Afecta a menos de un 2% de la población.
Se presenta con pequeñas estrías blancas en las mucosas y con zonas rojas que escuecen ante el contacto con determinados alimentos. Al ser una enfermedad no infecciosa no se contagia, pero no existe, por el momento, un tratamiento curativo y es una dolencia crónica que se manifiesta con brotes de actividad inflamatoria.
Existen dos tipos de liquen:
- Liquen plano blanco: Suele remitir de forma espontánea, de carácter benigno y que no suele requerir tratamiento. De carácter asintomático, a menudo las placas no son percibidas por el paciente, aunque éste puede notar una cierta rugosidad al pasar la lengua por las mucosas.
- Liquen plano rojo: Conlleva más molestias, como el picor o ardor, sobre todo al ingerir alimentos ácidos o salados. Además, cualquier traumatismo o incluso roce de las mucosas contra los dientes puede provocar una erosión y es importante su vigilancia para evitar que derive en lesiones malignas.
El paciente debe evitar las rozaduras con prótesis, fumar, ingerir alcohol o comer alimentos muy ácidos, picantes o calientes. No son recomendables las bebidas carbónicas, ni el uso de pastas o enjuagues bucales que puedan producir ardor.
Es muy importante mantener una extrema higiene dental diaria y limpiezas periódicas en el dentista, para evitar que la placa bacteriana favorezca la aparición de infecciones y dificulte la recuperación de las mucosas afectadas. Diversos estudios señalan también la influencia en esta patología (tanto en su aparición como en su desarrollo) de la ansiedad y el estrés.